Allanamiento equivocado. La denuncia está en los tribunales de Lomas de Zamora contra la comisaría Séptima de Glew y el comisario Gallegos.

Por Alexa Gorritti, hija mayor

El viernes 16 de septiembre a las 6.20, en el barrio 2 de Abril de Lomas de Zamora, Buenos Aires, la policía de la Comisaria Séptima de Glew lleva 16 patrulleros y allana una casa equivocada. Está habitada por 4 personas, dos menores –Melisa, de 14 años; y Gabriel, de 16 años) y dos mayores -Juana Terre y Alejandro Gorritti-. Ellos ingresan al domicilio rompiendo todo a su paso y disparando. Al primero que ven es a mi papá Alejandro, quien fue golpeado por 5 policías vestidos de civil y otros de uniforme; mi hermana Melisa se interpone entre ellos y mi padre para que no le sigan pegando, pero un policía (masculino) le pega a ella y la tira al piso.

Van hasta el cuarto de mi hermano Gabriel rompen la puerta y lo despiertan a los golpes. Mi mamá Juana busca y deja en la mesa los DNI de ellos, y la policía se da cuenta que se equivocaron tras 2 horas de interrogación, golpes y maltratos.

La policía Sétima de Glew, aparte de no saber hacer un allanamiento, está compuesta por ladrones con uniformes ya que le robaron los $120.000 que mi familia había ahorrado, antes de irse una de las policías toma la billetera de mi papá y saca la plata para uso del día.

La denuncia está hecha en Los tribunales de Lomas de Zamora contra la comisaría Séptima de Glew y el comisario Gallegos.

Lo más humillante. Mi papá estuvo esposado en bóxer y llorando pidió que le den los pantalones porque mi hermanita nunca lo vio así; encima un policía dice que mi hermana lo vista.

Irregularidad. Mi padre es contratista, es gasista, jamás estuvo detenido y ahora está mal, tiene miedo porque nadie los custodia. La policía que hizo el allanamiento es de otra jurisdicción, paso por encima de la comisaría de Lomas de Zamora.